Andrea Janeiro y los ‘odiadores’
Una chica de 18 años, hija de una persona popular, ha recibido estos días un linchamiento digital como no se recuerda.
Para Iker es tan injusto que nos hace partícipes de su indignación por lo que se esconde en este tipo de reacciones.
Un racismo moral y físico, una cobardía y una mezquindad sin límites. Y debemos denunciarlo.